Carrilleras de cerdo con camagrocs y champiñones portobello

La cocina tradicional y más concretamente los guisados son platos que engalanan muy bien las mesas y permiten disfrutar de una buena gastronomía a todos los comensales. En casa de mis padres muchas son las recetas que he podido saborear a lo largo de los años y hoy os aporto una propuesta de guisado con unas galtas o carrilleras de cerdo.

Ingredientes para 4 personas:

  • 4 carrilleras de cerdo
  • 4 cebollas grandes
  • 3 tomates
  • 4 champiñones portobello medianos
  • 300 gr. camagrocs o trompetas amarillas
  • Aceite de oliva virgen extra (AOVE)
  • Caldo de verduras, carne y pollo
  • 1 atadillo de hierbas
  • 1 picada (piñones, avellanas y almendras tostadas, pan)
  • Vino blanco
  • agua

Preparación:

 

 

Un apunte antes de iniciar la receta, es importante pedir en la carnicería que os corten cada carrillera en 3 partes.

Empezamos la receta cortando las cebollas en brunoise, y las ponemos a pochar, a fuego lento, durante una hora y media en una cazuela con un buen chorro de AOVE.

Pasada la primera hora, ya con la cebolla oscurecida, rallamos los 3 tomates y mezclamos bien. Llegados a este punto rectificamos de sal. Incorporamos el atadillo de hierbas. Seguimos cocinando los 30 minutos restantes. Al finalizar veremos que el sofrito está bien caramelizado y ofrece un aspecto brillante.

Salpimentamos los trozos de carrillera, enharinamos e incorporamos dentro de la cazuela. Mezclamos para integrar bien todos los ingredientes. Incorporamos un buen chorro de vino blanco y dejamos evaporar el alcohol.

Pasados unos 10 minutos cubrimos con el caldo y dejamos cocinar a fuego medio durante una hora aproximadamente. En este caso el caldo lo elaboré días antes, en invierno suelo hacer litros y más litros… Siempre va bien tener!! Si no queréis elaborar el caldo que no cunda el pánico tenéis opciones en el supermercado que os irán de perla, os recomiendo los caldos Aneto. Durante la cocción podemos rectificar de sal.

Limpiamos bien las setas, laminamos los champiñones portobello, y las salteamos en una sartén con un poco de AOVE.

Incorporamos las setas en la cazuela y dejamos que siga haciendo chup chup durante una media hora más y ya tenemos listo el plato para reposar. Os recomiendo que su todo lo contado hasta el momento se lleve a cabo el día anterior, el guiso quedará mucho mejor después de asentarse unas horas.

En el momento de servir calentamos y añadimos la picada (previamente pasada por el mortero) mezclada con un poco de agua. Nos permitirá potenciar el sabor del guiso, a la vez que nos ayudará a espesar un poco más la salsa. Removemos la cazuela y en unos minutos listas para servir.

Bon appétit!!

 

 

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