La Toscana nos recibió aquel verano con un calor extremo, aunque para refrescarnos siempre podíamos recurrir a las heladerías. ¡¡ Que helados!!. Florencia sorprende al viajero que siempre, y más en estas épocas del año, llena de visitantes sus calles y museos. Florencia enamora y nosotros nos enamoramos de Florencia, fue un amor correspondido.
Día 4
Nuevamente en marcha hacia el grandioso Palazzo Pitti que,¿cómo no?, fue la residencia de un banquero. El señor Pitti lo vendió más tarde a los Medici, éstos, que tuvieron una larga historia, fueron los que urbanizaron la colina Boboli convirtiéndola en un gran parque, el Jardín de Boboli. El palacio se fue ampliando, pasando después a manos de los Lorena y luego a los Saboya. En definitiva es un complejo museístico de 32 mil m² y los jardines con 45 mil m² son la mayor zona verde de Florencia, por no decir la única. Menudo palizón !! Por cierto, cuesta 7 euros solo el jardín.
Después de este vasto baño cultural, almorzamos en el Ristorante Ricchi, en el nº 8/9 de la Piazza Santo Spirito. Durante el día esta plaza la ocupan los vendedores de un extenso mercado, y por la noche se citan los jóvenes para frecuentar los talleres de artistas y artesanos o los restaurantes y locales nocturnos. Quizás por el bullicio y el personal poco profesional decidimos no volver.
Nos dirigimos a la Galleria degli Uffizi en la que se conservan un buen número de pinturas de:
– Sandro Botticelli (Adoración de los Magos, La Primavera, El Nacimiento de Venus…) – Leonardo da Vinci (La Anunciación…) – Caravaggio (Baco…) – Miguel Ángel (Tondo Doni…) – Tiziano (La Venus de Urbino…)
Ordenada construir por los Medici para instalar las dependencias de los órganos de gobierno que no podía absorber el Palazzo Vecchio. También destinaron parte del edificio para instalar las obras de su fondo de arte, al desaparecer la dinastía este fondo fue donado a Florencia, creció y ahora se considera uno de los museos más importantes del mundo. Aproximadamente sesenta salas albergan colecciones pictóricas y esculturas por épocas, estilos y autores. En verano es recomendable reservar entrada con suficiente antelación. Precio de las entrada 14 euros, audioguía 8 euros.
Nuevamente cenamos en el Restaurante Al Vecchio Carlino. Haciendo caso al proverbio, ”Más vale lo viejo conocido que lo nuevo por conocer”, decidimos repetir, o quizás fue porque nos pillaba cerca del hotel.
Día 5
Buenos días!! Hoy comienza nuestro último día en Florencia, todavía tenemos mucha carretera por delante. Después del desayuno vamos a comprar obsequios para la familia y amigos. Aprovechamos para dar la última ojeada a la ciudad.
Para el almuerzo nada mejor que la Trattoria Al Chirola di Jimmy, en el nº 16 del Viale Filippo Strozzi, cerca de la estación central Firenze SMN (Santa María Novella), considerada obra maestra del racionalismo italiano, y de la Basílica de Sta.Mª.Novella. El ambiente es acogedor, la comida perfecta, la atención del propietario y el precio excelentes.
Nos despedimos ya de Florencia y como alguien dijo: “volveremos… y no es una amenaza”. Por la RS 69 nos dirigimos a Arezzo, a 83 km. Antes paramos en Leccio, en el outlet The Mall, en la Via Europa nº8, aquí hay una gran representación de las mejores marcas italianas, dicen que a precios excelentes, esperamos encontrar alguna prenda interesante que llevarnos al cuerpo. Al final, percibimos que no tenemos suficiente bolsillo para estos precios, aún con descuento.
Arezzo nos recibe en lo alto del valle del río Arno, es la capital de la província y fue la cuna de Petrarca considerado uno de los padres de la lengua italiana. Conserva piezas únicas de arte medieval y del Renacimiento, algunas de ellas se pueden admirar juntas en la Piazza Grande.
En esta plaza medieval, la más notable de la ciudad, destaca:
– El Ábside de la Chiesa de Santa Maria della Pieve. – El mercado principal de la ciudad, con un pavimento inclinado de ladrillo rojo, donde se celebra la Giostra del Saracino ("Justa del Sarraceno"). – El Palazzo della Fraternita dei Laici (Palacio de la Fraternidad Laica). – La Logge del Vasari construido sobre los destruidos Palazzo Comunale (Ayuntamiento) y el Palazzo del Popolo Palazzo Episcopale. – El Monumento al Gran Duque Ferdinando I de Medici. – El Palazzo Cofani-Brizzolari, con la Torre Faggiolana.
Por cierto en esta plaza se rodaron escenas de “La Vita è Bella” de Roberto Benigni. En muchos rincones de Arezzo hay carteles señalando lugares del rodaje de ésta película.
Para dormir, esta vez escogimos un hotelito, el Albergo La Toscana, en la Via Perennio nº 56. Habitaciones confortables y precio ajustado. Perfecto para pasar la noche. El desayuno en el Bar Memmo, cercano al albergo, clásico desayuno italiano a buen precio.
Día 6
Buenos días Arezzo!! Desayunamos y ponemos la directa para visitar la ciudad. Primero, siguiendo por la calle del albergo, llegamos a la Via Ricasoli donde se encuentra la Cattedrale di San Donato (Il Duomo de Arezzo). En ella podemos admirar entre otras obras, la María Magdalena de Piero della Francesca (nacido en Sansepolcro cerca de Arezzo), junto a la puerta de la sacristia. Por debajo de la catedral, a mano izquierda el Palazzo della Provincia y a la derecha el Palazzo Comunale (Ayuntamiento). La primera calle a la izquierda es la Via dell’Orto, donde encontramos la casa en la que al parecer nació Francesco Petrarca, que como ya he dicho fue uno de los padres de la lengua italiana, hoy alberga la Academia de las Letras, las Artes y las Ciencias. Seguimos bajando por la Via Andrea Cesalpino hasta llegar a la Basilica di San Francesco, donde en la Cappella Bacci se exponen los frescos de la "Leyenda de la Vera Cruz" de Piero della Francesca. Como en muchas poblaciones toscanas, hay tanto para ver y admirar en Arezzo, pero mejor lo descubrís vosotros.
Hemos de seguir viaje, son 30 km. hasta Cortona. Antes paramos en Castiglion Fiorentino, ésta puede que sea una de las poblaciones que reune más edificios religiosos y civiles, entre ellos destacan:
– El Palazzo Comunale (Ayuntamiento), situada en la Piazza del Municipio (al sureste de la población).- Frente al anterior la Logge del Vasari, retocadas por éste famoso artista. – La Torre del Cassero, construida sobre unas ruinas etruscas, que domina la ciudad. – La Collegiata di San Giuliano, hermosa colegiata frente a la iglesia parroquial del mismo nombre, en la que se conservan varias pinturas.
Llegaremos a Cortona, pasaremos por Siena y se hará esperar la guinda de San Gimignano de le Belle Torri. Seguiremos por la Ruta del Chianti. Pero esto será próximamente.
