Es tiempo de espigalls. Una verdura que tiene su origen en la col brotonera y que podemos encontrar en las comarcas del Garraf y del Vallès Occidental.
Este año llegué casi al límite para degustar els brotons de la col brotonera (a la izquierda de la foto) así que lo compensé comprando los espigalls (a la derecha de la foto).
El proyecto de recuperación en el Vallès es una iniciativa de las Fundaciones Sant Galderic y Miquel Agustí. Habitualmente los compro en Els Campaners del Mercat del Triomf de Terrassa. En la web de Visita Terrassa podéis encontrar más información así como el listado de vendedores y recetas.
En esta ocasión, coincidiendo con el jueves lardero cociné una sabrosa tortilla de espigalls que me sirvió para rellenar una sabrosa coca de chicharrones. El contraste dulce-salado en este caso funciona a la perfección.
Ingredientes para la tortilla:
- 6 huevos
- 2 manojos de espigalls (unos 500 grs.)
- agua
- sal
Ingredientes para la coca:
- 1 lámina de hojaldre
- 200 gr. de chicharrones
- 80 gr. de azucar
- 1 huevo (yema)
- 100 gr. piñones
Para el mazapán:
- 50 gr. de almendra en polvo
- 50 gr. azucar glass
- agua
Preparación:
- Limpiamos bien los espigalls y quitamos aquellas partes más fibrosas.
- Incorporamos los espigalls en una olla con agua y sal.
- Hervimos no más de 5-10 minutos, lo justo para que nos queden ‘al dente’. Escurrimos bien y reservamos.
- En un cuenco batimos los huevos con un poco de sal e incorporamos los espigalls. Mezclamos bien.
- En una sartén de unos 18 cm añadimos un poco de AOVE para cocinar esta sabrosa tortilla. Reservamos.
- Cortamos un par de hojaldres de unos 20 cm.
- En una bandeja de horno ponemos una hoja de papel sulfurizado e incorporamos una de las láminas.
- Preparamos el mazapán mezclando todos los ingredientes y disponemos una generosa capa.
- Trituramos los chicharrones y los esparcimos por encima de la masa.
- Cubrimos con la otra lámina de hojaldre circular.
- Con la ayuda de un tenedor pinchamos la superficie, así evitamos que la masa se hinche en el horno. Pintamos la superficie con la yema de huevo. Espolvoreamos con el azúcar y esparcimos los piñones. Introducimos en el horno precalentado a 180ºC durante unos 15 minutos.