El Berguedà, un enclave para disfrutar en un entorno familiar

A veces cuando queremos hacer una escapada o programar nuestras vacaciones no somos conscientes de que muy cerca de casa hay un sinfín de actividades, que nos permiten disfrutar y conocer mucho más nuestro territorio.

Hoy me traslado hasta el Berguedà para contaros algunas de las actividades que se mueven en esta comarca barcelonesa y que pude disfrutar en el reciente blogtrip #Berguedafamiliar. Todas las actividades referenciadas están gestionadas por el Museu de les Mines de Cercs y forman parte de las rutas de #turismoindustrial y/o #turismoresponsable que recorren Cataluña.

El punto inicial del encuentro fue La Presa de La Baells, un embalse, de más de 100m. de altura y con capacidad de 109hm3 de agua, construido durante la época franquista (1972 – 1975) e inaugurado en el inicio de la democracia (1976). Nació con el objetivo de regular el agua del Río Llobregat (170km) y abastecer de agua a 14 colonias téxtiles, por muy poco tiempo ya que llegó la crisis, y a toda el área metropolitana de Barcelona incluyendo el Parque Agrario del Llobregat, el huerto periurbano de Barcelona.

Allí ‘Aprendimos a ser ingenieros’. En equipos de 4 personas nos entregaron una maleta, unos chalecos, un identificador y unas instrucciones. A partir de ese momento nuestra misión fue recopilar información para completar un dossier y conseguir descifrar los códigos para la activación de La Presa.

Una actividad interactiva que discurre por las galerías interiores de la presa y perimetral descendiendo hasta la cota 610, que se encuentra bajo el nivel actual del agua.

Galerías internas de la Presa de la Baells

La Presa de La Baells alimenta al río Llobregat que atraviesa Cataluña de Norte a Sur cruzando el Berguedà, el Bages, el Baix Llobregat y desembocando en el Mar Mediterráneo. Actualmente, un 50% de su agua se destina al uso doméstico, un 30% al riego y un 20% a la industria.

Datos: Presa de la Baells

Para llevar a cabo su construcción se tuvieron que tomar decisiones que dejaron huella, mucha huella. Unas 1.500 personas fueron desalojadas del pueblo de Sant Salvador de la Vedella, y la fachada y el ábside de la iglesia de Santa María de la Baells fueron desmontados, a la espera de un montaje pospuesto hasta la fecha. Toda esta zona y su extensión agrícola, la línea de ferrocarril que unía Manresa con Guardiola de Berguedà fueron ocupadas por las aguas de la Presa de La Baells. Un nuevo pueblo llamado Sant Jordi de Cercs fue el nuevo hogar para estas familias desalojadas.

Otra huella a tener en cuenta es la hídrica. El agua es un bien estratégico y es muy importante ser conscientes de la cantidad necesaria para cubrir las necesidades básicas de la población. Este panel habla por si sólo… ¿Somos realmente conscientes de ello? El debate sigue abierto.

Vídeo Resumen Visita La Presa de la Baells #Berguedafamiliar

Más información y actividades en www.mmcercs.cat


Es el momento de partir, siguiendo en dirección a la parte norte del pantano, cruzando la Central Térmica de Cercs. Tan sólo unos quilómetros más, llegamos al Museu de les Mines de Cercs ubicado en la antigua Colonia de Sant Corneli, uno de los núcleos mineros más importantes de Cataluña.

El museo fue fundado en 1999 formando parte del Museu de la Ciència i de la Tècnica de Catalunya y adherido a la red de museos locales de la Diputació de Barcelona.

Antes de iniciar la visita tuvimos un momento para reponer fuerzas en el bar del mismo edificio. Allí degustamos una rica coca de la panadería Ca l’Agustí de Cercs. Echad un vistazo al IG Ca l’Agustí no tiene desperdicio!

Coca de la panadería Ca l’Agustí de Cercs

Con el estómago saciado, llegó la hora de coger el tren de la mina y retroceder en el tiempo hasta el s. XIX. Nos adentramos unos 500 metros en el interior de la Mina de Sant Romà, cuya longitud total fue de 6 km.

1860

Escena del trabajo en la mina (1860)

El trabajo de minero recaía en obreros no profesionales, siendo los propios payeses de la zona quienes explotaban los recursos de la mina. Un trabajo exclusivamente físico y manual, el carbón se arrancaba con la ayuda de un pico y se arrastraban vagonetas de hasta 1.700 kg. La falta de oxígeno y la escasa iluminación fueron grandes inconvenientes, unas condiciones que conllevaron muchos riesgos para la salud. Las medidas de prevención corrían a cargo de canarios, por su capacidad pulmonar inferior a los humanos indicaban con tiempo la falta de oxígeno. En el caso de las ratas, éstas huían si se acercaba un derrumbe en el interior de la mina. ¡Unos ayudantes que no fallaban!

1930

Años más tarde de la llegada de la electricidad al interior de la mina, y bajo la dirección de Carbones de Berga, en 1930 se introdujeron los martillos neumáticos de aire comprimido que facilitaron el uso de cargas explosivas para la extracción del carbón. La fortificación con pilares belgas de fricción permitió el trabajo de pie del minero, que ya es profesional aunque todavía con una indumentaria de calle y sin medidas de seguridad. En este período se mejora en la producción, pero no en seguridad. La salud del minero seguía afectada, la esperanza de vida era de 35 a 40 años.

1965 – 1975

Durante la década de los 60 y 70, se incorporan los pilares rusos, que aguantan mucho mejor la presión de la montaña, la cinta transportadora y el cepillo que permitieron la mecanización del trabajo en la mina, por lo que la minería dejó de ser manual. Cabe decir que, en los años 70 toda la producción de Carbones de Berga se trasladaba directamente a la Central Térmica de Cercs. Los mineros son abastecidos de Equipos de protección individual (EPIs): casco, mono, guantes, botas de agua, autorescatador y además se crea la brigada de salvamento.

A pesar de todos los avances técnicos y de seguridad, el trabajo en la mina siguió siendo peligroso especialmente debido al grisú, un gas que con el contacto con el oxígeno provoca explosiones, como ocurrió en 1975 con la explosión donde perdieron la vida 30 mineros.

El trabajo de los mineros no sólo cambiaba sus vidas sino también la de toda su familia que vivía en la misma colonia.

La actividad en la mina de Sant Corneli cesó en el año 1991.

Exterior Mina de St. Corneli (Cercs)

La visita al Museu de les Mines de Cercs se puede completar con un recorrido por los 150 años de explotación de la mina, a través de una exposición permanente que incluye dos audiovisuales de las reivindicaciones más emblemáticas del colectivo minero: “Els Fets de Fígols de 1932” y “La Tancada de 1977”. Además se puede visitar la réplica del hogar de un minero y disfrutar de un paseo por toda la colonia. Un museo que mantiene vivo el recuerdo preservando la memoria de la que fue la actividad industrial y motor del Berguedà durante décadas.

Más información y actividades en www.mmcercs.cat


La siguiente parada es el Centro de Interpretación Dinosaurios Fumanya a unos 8 km del punto actual y ubicado cerca del pueblo de Fígols. Este proyecto se ubica alrededor de la explotación minera de Fumanya, operativa entre 1975 y 1986, y que dejó al descubierto este gran yacimiento paleontológico con más de 3.500 huellas de dinosaurios. Una época donde dominaba el clima tropical con grandes extensiones de palmeras y helechos. ¡Increíble, pero cierto!

Este yacimiento bergadano, que abrió sus puertas en 2017, es el más extenso de Europa con huellas o icnitas de saurópodos del Cretáceo Superior y el más reconocido a nivel mundial. Un más que interesante viaje de 65 millones de años y muy bien entrelazado con la ruta minera del Berguedà. De hecho en esa misma época coincidieron dos efemérides importantes, la extinción de los dinosaurios y el nacimiento del carbón después del movimiento de las placas continentales y de la formación de las montañas.

En 1975 se iniciaron las excavaciones de la mina para la extracción del lignito hasta llegar a la roca madre o marga, una piedra calcárea con arcilla donde se descubrieron las huellas de dinosaurios. Y aquí empezó todo el proceso de protección, llegando a la última fase de museización del Centro de Interpretación Dinosaurios Fumanya.

Las huellas más comunes son las del Titanosauros que se alimentaba básicamente de materia vegetal y que podía alcanzar unos 15 metros de longitud y 20 toneladas de peso. ¿Os apetece caminar entre dinosaurios? Pues os invito a entrar dentro del museo, os espera un gran viaje.

Fémur de titanosauro

En la planta 0 luce una exposición permanente que permite hacer un recorrido por nuestro mundo cambiante, por la historia de la vida y en especial por la gran familia de los titanosauros de Fumanya. En la planta inferior se ubica un espacio audiovisual y exposiciones temporales, y otro para talleres. Desde aquí también se puede acceder a un esplendoroso mirador.

Más información y actividades en www.dinosauresfumanya.com


Sin duda la ruta #Berguedafamiliar permite disfrutar tanto a los más pequeños como a los adultos, y merece la pena no dejarla escapar. La geología, la paleontología y la minería se entrelazan para hacernos descubrir lugares e historias que hasta el momento eran desconocidas.

Vistas del Pantano de La Baells desde la carretera BV-4025

Antes de finalizar esta crónica, dar las gracias a Ivan, Francesc y Salvador, los 3 guías que nos acompañaron en la Presa de la Baells, Mines de Cercs y Dinosauris Fumanya, respectivamente. Sus detalladas explicaciones nos ayudaron a entender mucho mejor nuestro territorio.

Y agradecer especialmente también a Museu de les Mines de Cercs, VantiDigital y Donde Vamos Eva por la organización y por poder participar en este encuentro.

Si queréis seguir descubriendo más sobre #Berguedafamiliar os emplazo a leer el resto de crónicas realizadas por l@s compañer@s de ruta.

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