Lluís Romero, filólogo y sumiller, nos abrió un mundo ciertamente olvidado de los vinos dulces de Cataluña durante la presentación de su libro ‘Els millors vins dolços de Catalunya’ editado por Cossetània Edicions. Romero afirma que ‘los vinos dulces son vinos históricos a lo largo de todo el Mediterráneo, pero en Cataluña hay que aprender a quererlos más’.
Un libro que se gestó durante un año, el tiempo necesario para que Lluís seleccionase las 130 referencias que aparecen en el libro. Todo un gran trabajo que ya puso de manifiesto en sus anteriores libros editados, ‘Grans vins catalans a petits preus (2018)’ y ‘Els vins secrets de Catalunya (2016)’.
“El vino dulce es, sin duda, el gran tesoro olvidado de la viña catalana. Se elaboran de fascinantes y emocionantes, pero, por desgracia, demasiado a menudo pasan desapercibidos. Este libro quiere ayudar a redescubrirlos, a disfrutarlos con maridajes creativos y a enamorarnos hasta sentirlos propios e imprescindibles, recordando que, cuando bebemos vino dulce, bebemos Mediterráneo, bebemos la esencia de la uva y bebemos rayos de sol, bebemos, en resumen, historia líquida de nuestra tierra.”
Epílogo ‘Els millors vins dolços de Catalunya’ de Lluís Romero
Curiosamente en Cataluña se producen todas las tipologías que existen en el mundo. Y cuáles son?
- Botritis: elaborado a partir del ataque del hongo parásito Botrytis Cinerea.
- Dolç Natural (Dulce natural): resultado de la combinación de una parte de alcohol añadido y otra parte de alcohol adquirido.
- Escumosos (Espumosos): vino que contiene gas carbónico disuelto
- Misteles (Mistelas): un vino de licor procedente de la mezcla de alcohol vínico y el mosto con alto contenido de azúcar.
- Rancis (Rancios): históricamente elaborado en botas viejas o ‘padrina’ cuyo vino procedía de diferentes añadas.
- Verema tardana (Vendimia tardía): procedente de uva de vendimia tardía para obtener alto índice de azúcar, sin adición de alcohol vínico.
- Bullit (Hervido): procedente del hervido del vino para eliminación del agua y salvaguardar el azúcar, se remonta a la Antigua Roma.
- Vi de panses (Vino de pasas): proveniente del secado para deshidratar las uvas que se convierten en pasas, obteniendo mostos muy concentrados.
- Vins freds (Vinos de hielo): elaborados a partir de uvas heladas (entre -7ºC y 12ºC)
Cada tipología de vinos dulces viene acompañada de diferentes propuestas, y para cada una de ellas se proponen sugerencias de maridaje. Además cada vino se completa con una extensa descripción, características técnicas y ficha completa.
La presentación concluyó con la degustación del Dolç Adrià, un vino dulce natural de la bodega Albet i Noya, presentado por Núria Martí, sumiller y responsable de comunicación de Albet i Noya.
Dolç Adrià procede de agricultura ecológica elaborado a partir de uva merlot y syrah sobremadurada en la vid de forma natural, recogida y seleccionada a mano durante el mes de noviembre, y macerada con la piel durante 3 meses. Envejecido durante 25 meses en botas de roble. Un vino dulce a la vez seco y muy harmonioso. El Dolç Adrià es ideal para maridar con un buen queso azul, como nos apuntó Nuria. Y también siguiendo las recomendaciones de Lluís, conjuga a la perfección con brownie de chocolate, cremoso de mascarpone con coulis de cerezas o chocolate negro con frutos secos. Y sí, recuerda mucho a los vinos de Porto.
La presentación se llevó a cabo en el Tros de Vall Llach, que como bien se define es un local donde beber y experimentar con el vino, comer proximidad y compartir solidaridad y cultura.
Muy curiosa su entrada donde se ubican 7 tinas con diferentes monovarietales del Priorat para degustar y crear nuestro propio coupage.
Un salón principal, una terraza exterior y un reservado para 8 personas en la rebotica completan las zonas habilitadas para degustar sus propuestas gastronómicas, maridadas con una carta de vinos cuidadosamente seleccionada. Dejaros aconsejar por su sumiller Rosa!
Su cocina está abierta de miércoles a sábado, de19h. a 23:30h. y en ella encontraréis aperitivos como la gilda del Tros o las anchoas de l’Escala; las pizarras de quesos y de embutidos y patés de la Vall d’Aran; los platillos para compartir como el lomo de bacalao al pil pil con puré de calabaza o carrillera de cerdo deshuesada con escabeche muy suave de setas.
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