En mi etapa laboral como responsable de un departamento de compras, tuve la suerte de viajar por el norte de Italia. En una de estas visitas me invitaron a un restaurante de la bella población de Biella, a los pies de los Alpes Biellanos, perteneciente a la región del Piamonte. A decir verdad era una cena informal que compartía con un buen colega y amigo. Como bien sabréis todas las poblaciones vecinas a zonas montañosas disfrutan de excelentes aguas, procedentes de acuíferos o del mismo deshielo. Además, estas aguas son imprescindibles para elaborar notables cervezas. Así que, sin mediar palabra mi amigo pidió dos cervezas Menabrea Ambrata (Ambar), de la misma población y elaborada al estilo Marzen, para acompañar el plato que hoy os voy a recomendar: Pizza de queso Gorgonzola con pera.
Ingredientes para 4 personas:
Para la masa:
- 175 gr. de harina
- 15 gr. de levadura fresca
- 110 ml. de agua
- 5 gr. de sal
Para la cobertura:
- 2 tomates maduros medianos rallados
- 200 gr. de queso Gorgonzola (una cuña)
- 2 peras Conferencia
Elaboración:
- Mezclar en un bol de cristal, el agua natural, dos cucharadas de harina, la levadura y la sal. Tapar con un trapo de cocina e introducir en el horno apagado. Dejar durante 10 minutos.
- Pasado éste tiempo observaréis en la superficie pequeños agujeros por efecto de la levadura. Añadir el resto del agua y mezclar conb una espátula, añadiendo poco a poco la harina hasta que se haya formado una bola que se despegará de las paredes. Espolvorear con harina la encimera y amasar, tirando de la masa y plegándola sobre si misma. Introducir de nuevo en el bol, tapar y dejar levar durante otros 30 minutos.
- Terminado el levado, espolvorear la encimera con harina, amasar de nuevo y con un rodillo estirar hasta conseguir una circunferencia cuyo diámetro sea aproximado al ancho (fondo) del horno. Podéis doblar el borde para dar un poco más de grosor a la masa.
- Situar la masa sobre una hoja de papel sulfurizado, enrollándola previamente sobre el rodillo. Pintar con tomate la superficie. Introducir en el horno pre-calentado a 250º durante 8 minutos (si es posible con el aire en marcha).
- Retirar del horno, sin pararlo. Cortar una cuña de queso Gorgonzola a lonchas triangulares finas (12), disponiéndolo sobre la masa proporcionalmente (separándolas entre si). Sobre éste colocar la pera pelada y sin corazón, a gajos no muy gruesos superpuestos. Introducir de nuevo sobre la solera y dejar hasta que la masa esté cocida, unos 20 minutos. Durante los últimos 5 minutos ayudados con una rejilla se puede situar cerca del grill para que se dore. Puede que el papel se oscurezca, pero no se quemará.
No pretendemos abrir un debate entre la pizza de masa gruesa o delgada, a decir verdad en Italia generalmente la masa es gruesa, pero como todo en la vida: contra gustos no hay disputas. A nosotros nos gusta delgada, aunque en este caso es mejor hacerla media, es decir ni la una ni la otra.
Como el queso Gorgonzola es de sabor y olor fuertes, al pertenecer a la familia de los quesos azules, es necesario una buena masa para suavizar un poco éste sabor. La disparidad de sabores entre el queso y la pera será satisfactorio para aquellos que os gusten los contrates extremos.