El pasado sábado 13 de diciembre tuve el placer de adentrarme en el Camp de Tarragona y disfrutar de los productos de proximidad que nos ofrece Ca Rosset acompañados de Artik Catering de Valls y la bodega Celler Hidalgo Albert (Priorat D.O.Q.) de Poboleda.
Llegados todos los convocados al punto de encuentro en el local de Ca Rosset en Villalonga del Camp (Tarragona) allí nos esperaba Ester Gomis quien gestiona la comercialización de los productos kmO del Mas de Cal Molí que regentan María y Jaume, los padres de Ester, quienes trabajan las tierras por donde pudimos pasear. Un entorno rural y natural que nos proporciona productos de gran calidad como son las aceitunas, las avellanas, las almendras y las mandarinas.
Actualmente el Mas de Cal Molí gestiona unas 30 hectáreas de avellanos, y dispone de 1.600 olivos (5 a 6 hectáreas) y 1400 almendros.
La ruta por los campos empezó en la zona de los olivos donde pudimos recoger las últimas aceitunas arbequinas de la zona y de la forma tradicional.
La totalidad de los olivos de la familia Gomis-Fortuny son procedentes del clon i-18 de la variedad arbequina, que se reproduce implantando un injerto para producir nuevo olivos.
El tipo de agricultura practicada en el Mas de Cal Molí es la integrada, la agricultura ecológica no termina de adaptarse debido a las plagas como la de la mosca del olivo que afecta directamente al fruto. En la agricultura integrada se realizan tratamientos, controles y analíticas periódicas siguiendo todos los protocolos establecidos por los organismos de control.
Tal y como nos apuntó Jaume, la aceituna arbequina se tiene que recoger y moler el mismo día para evitar que el aceite tenga un gusto amargo y que se acentúe su acidez. Actualmente este trabajo se realiza con tractores extendiendo por debajo de los olivos la ‘borrassa’ (tendal), una extensa red de tela verde de unos 7m. x 14m. para recoger las aceitunas.
Antes de moler las aceitunas se limpian con agua caliente y posteriormente se molen y se saca el aceite en caliente con una temperatura máxima de 27 grados. Justo en este momento se extrae lo que se llama ‘l’oli de raig’ (aceite de chorro), es decir aceite sin filtrar. Aceite en estado puro, el oro de la aceituna.
En un proceso posterior se elabora el aceite filtrado (OJO que no es lo mismo que el aceite refinado que contiene grasa vegetal mezclada con aceite de oliva virgen extra). Aproximadamente con unos 100kg de aceitunas arbequinas se pueden llegar a producir unos 18 litros de aceite, pero eso dependerá de su tamaño, del lugar y de las condiciones climatológicas.
Esther nos puntualiza que el color, que depende de la maduración de la aceituna, no determina su calidad. Y es importante que el consumo sea preferentemente de aceite de oliva virgen extra, hay que huir del aceite de oliva, del aceite refinado o del aceite lampante.
Seguimos avanzando en el terreno y nos adentramos en la zona de los avellanos donde se cultiva la variedad de avellana negreta, la más valorada de la zona. El avellano es un arbusto y lo más curioso del caso es que la flor, que nace antes que las hojas, puede ser masculina o femenina, y sólo se polinizan entre diferente variedad de avellanos. Así que cada tres o cuatro filas de avellanos se planta una variedad diferente. La maduración de la avellana puede tardar unos 8 meses.
Una vez finalizada la ruta por los campos es el turno de hacer una cata de sus productos. Empezamos por la cata de las avellanas. Ester nos comenta como debemos hacer la cata de las avellanas. Cogemos 3 avellanas y cerramos el puño de esta manera alcanzan la temperatura corporal y se activan los aceites y aromas. Minutos más tarde abrimos un poco la mano y olfateamos. Mmmmm qué olor!! Seguidamente cogemos un trozo de avellana y la probamos.
A diferencia de otras avellanas, la variedad negreta se recoge del suelo por lo que resulta lo suficientemente madura para proporcionar un buen sabor y olor.
Es el turno de la cata de aceites, donde pudimos degustar entre otros el aceite de oliva virgen extra Ca Rosset, elaborado con sus aceitunas arbequinas maduras, con sabor suave y olor intenso.
Sin duda unos productos con una calidad excelente gracias a l
En este punto de la jornada se unieron a la cita Manolo Hidalgo de la Bodega Celler Hidalgo Albert (Priorat D.O.Q.) de Poboleda (Tarragona) presentando su gama de vinos ecológicos elaborados con las variedades: Cabernet Sauvignon, Cariñena, Garnacha Blanca, Garnacha Negra, Merlot y Syrah.
Y por otro lado, Albert Roig de Artik cafeteria-restaurant-catering de Valls (Tarragona) que nos ofreció diferentes propuestas culinarias para maridar con la selección de vinos.
Manolo nos comentó que la bodega Celler Hidalgo Albert empezó su andadura en el año 2004, trabajando las tierras como lo hacían antiguamente sus padres. Antes de empezar la cata nos contó la historia de la bodega y de donde proviene el nombre de su principal vino el ‘1270’, el año en que el Abad Bernat de Déu dio el visto bueno para que 11 familias de la zona construyeran un nuevo pueblo llamado Poboleda y labraran sus tierras.
Abrimos la cata con el vino blanco, 1270 a vuit blanc (2007), que nos sirvió para acompañar un salmón a la papillote envuelto con papel de aluminio y recubierto con ‘terrissa’ (barro) aderezado con comino y sal y hecho a la brasa.
Seguimos con el vino tinto 1270 a vuit Fina (en honor a su mujer) y que maridó con la ‘clotxa’ un tradicional manjar de campesinos que consiste en rellenar un pan de payés con arenques, tomacons (tomates de colgar que se recogen en verano y se cuelgan durante el invierno) y ajos escalibados. En este caso Albert nos sirvió su versión mini, pero igual de sabrosa!
Le siguieron un vino negro 1270 (2009) de unos 15 grados, un vino agradable, redondo y suave.
Y llegó el momento del postre con una deliciosa espuma de nata, nueces, azúcar y azafrán con una esferificación de jalea de azafrán y acompañada por unas ricas avellanas garrapiñadas.
Ester nos explicó la receta para elaborar estas ricas avellanas garrapiñadas: 500gr. de avellanas, 500gr. de azúcar, 250 ml. de agua, todo dentro de un cazo sin dejar de remover. Para que no se apelmacen disponerlas encima del mármol con un poco de aceite. De hecho no olvidéis hacer una ojeada a su blog donde podréis encontrar algunas recetas interesantes como la salsa de calçots.
El postre lo acompañamos con un vino dulce (garnacha blanca).
Y después de una sobremesa llegó el momento de despedirnos no sin antes ser obsequiados con una selección de productos Ca Rosset, sin olvidar las ricas mandarinas que nos ofreció Jaume. No hay que olvidar que también son cultivadas en los mismos huertos y que con ellas se fabrica una deliciosa mermelada de mandarinas elaborada por Els Fruits Saborosos.
Muchas gracias Esther, Jaume, Maria, Manolo y Albert por recibirnos con los brazos abiertos y acercarnos cada una de vuestras historias que hacen posible todo lo que pudimos compartir en esta experiencia.
http://instagram.com/p/wiiE0WrWfP
En la tienda online de Ca Rosset podéis encontrar su selección de productos kmO y además durante estas fiestas de Navidad usando el código #jaesnadal se aplica un 10% de descuento en vuestra compra de productos.
Y si queréis ver lo que dio de si esta jornada sólo tenéis que revisar el hastag #CampRosset en Twitter e Instagram.
Ca Rosset
Ester Gomis Fortuny
c. Pere Virgili, 46
Vilallonga del Camp (Tarragona)
info@ca-rosset.com
www.ca-rosset.com
Tel. 699 100 901Artik
Cafeteria · Restaurant · Catering
c. Vallvera, 19
(frente Mercadona)
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Tel. 977 605 804Celler Hidalgo Albert
Priorat D.O.Q.
hialmi@yahoo.es
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Tel. 659 060 692
Tel. 656 975 286
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Y muchas gracias Gemma @DivinosSabores por organizar e invitarnos a este evento y hacernos descubrir la esencia y la historia de los productos de nuestra tierra.
Un saludo y abrazos a tod@s!
